(Dá 4 en realidad)

lunes, septiembre 29, 2008

Interín

Leer un libro en el subte implica tener que cerrarlo de prepo en algún momento de la historia y tener que salir a los pedos de la formación.

Caminás por las catacumbas y sabés que, de todas las personas que te rodean como ovejas, ninguno tiene la mínima idea o sospecha de que vos en tu cabeza tenés a todo un mundo en una dimensión paralela totalmente paralizada y petrificada. Los personajes quedaron en escena enmudecídos y congelados desde el primer momento en el que cerraste el libro.

Llegás a tu casa, tirás tus cosas en la mesa, te sentás y lo abrís nuevamente.

Show must go on.

un ☼ pa´ lo nene